El telégrafo óptico tuvo un desarrollo tardío en España, de forma que se instaló a mediados del siglo XIX. Las turbulencias, el estado de guerra civil casi permanente y el bandolerismo endémico llevaron a que las estaciones repetidoras estuviesen fortificadas, siendo en realidad pequeños fortines. La del Barrial era la estación nº 2 de la línea Madrid-Irún, que funcionó entre 1848 y 1855. Figura en los planos hasta la década de los años 30. Es posible que se destruyese en los combates de 1936-37, ya que la carretera de la Coruña fue cortada aquí y quedó así en el frente. Con las reconstrucciones de posguerra y la intensa urbanización de los últimos años ha desaparecido totalmente.
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